La contaminación cruzada es el proceso por el cual los alimentos que entran en contacto con otros (cocinados o no) intercambian sustancias que hacen que dejen de estar en perfectas condiciones para su consumo. Un ejemplo más gráfico para entender en qué consiste es el contacto de la sangre de la carne con alimentos cocidos.
Existen dos tipos de contaminación cruzada, directa e indirecta. La directa es aquella que se produce cuando los alimentos entran en contacto y se contaminan entre sí (alimentos crudos, contaminan alimentos cocinados, como el ejemplo que ya hemos mencionado).
La contaminación cruzada indirecta es la que se produce cuando son los utensilios de cocina los que están contaminados y entran en contacto con alimentos tanto crudos como cocinados.
El mayor riesgo que acarrea la contaminación cruzada es que los alimentos contaminados se consuman crudos después. Es decir, si los alimentos se cocinan bien después de haber sido contaminados, no hay ninguna razón por la que preocuparse porque la acción de cocinarlos hace que la contaminación desaparezca. Si no se cocinan bien, no hay ocasión de matar a los microorganismos que habitan en ellos. Y entonces, se pueden dar tres situaciones:
Entre las medidas para prevenir la contaminación cruzada estaría la separación de los alimentos a varios niveles. Uno es el de los alimentos crudos de los cocidos o cocinados. No dejes que entren en contacto y asegúrate de que la sangre de la carne roja no toque ningún otro alimento. Otra separación es la de poner en cajones o bolsas diferentes las carnes, los pescados y las aves. No permitas que mantengan contacto con el resto de los alimentos. Y una más es guardar la carne cruda en recipientes herméticamente cerrados para que la sangre no gotee.
Esto en cuanto a la separación, a la hora de manipularlos, utiliza diferentes cuchillos o herramientas y que siempre estén limpios antes de utilizarlos. Esto también aplica a los paños de cocina.
Ante todo, la higiene y la limpieza son fundamentales. Tanto personal a través del lavado de manos, como a nivel del lugar en el que se tratan y preparan los alimentos. Para ello, desde Pro Formula contamos con un amplio servicio de productos profesionales de limpieza para la desinfección y seguridad en los espacios de trabajo en los que se manipula comida. Como, por ejemplo, CIF Pro Formula Detergente Desinfectante Concentrado, un potente desengrasante desinfectante líquido para todas las superficies de la cocina. Efectivo contra un amplio espectro de microorganismos, no contiene perfume por su propia naturaleza y fin y cuenta con registro HA.
Pero en nuestra web encontrarás muchas más opciones, así como la ayuda de nuestros expertos profesionales con los que puedes ponerte en contacto a través de aquí.
Es un detergente desinfectante altamente concentrado
que limpia y desinfecta todas las superficies en un solo
paso. Muy …